viernes, 18 de diciembre de 2015

LA NAVIDAD PARA MI


La pregunta era la misma para todas las navidades ¿Quién quieres que te traiga los regalos: Santa Claus o el Niño Dios? He de ser honesto y confesar que me decidía por Santa Claus…Vamos, me parecía más excitante pensar que en la noche del 24 mientras dormía, mi querido amigo misterioso se escurriría por la casa y me dejaría los regalos ¿Cómo hacía para entregar tantos regalos en todo el mundo? ¡Era mágico! Y el niño Dios, siendo un niño, iba a ser difícil que lograra hacer todo eso porque de todos modos, a como me lo imaginaba, él no podría caminar.


Lo interesante es que Santa Claus era en verdad muy pobre porque mis papas tenían que comprar el regalo para que Don Santa pasara por la tienda, recogiera el regalo y me lo fuera entregar en nochebuena. Nunca pensé que hubiera sido más fácil que mis papas me dieran de un solo el regalo. Pero se hubiera perdido la magia de ver el regalo en la mañana del 25.

Del que más tengo memoria es la navidad de 1975 cuando recibí El Hombre Nuclear junto con su traje y la nave espacial, la cual nunca apareció en la serie.´

Con el tiempo me llegué a dar cuenta que el bendito Santa Claus no existía…ahí perdí toda inocencia y ya mis ojos no volvieron a ver al mundo de la misma manera.

Pero haya sido una idea errónea o no, esto me ayudo a guardar buenos recuerdos de navidad, una época en la que se gasta lo que no se tiene, pero que se vive en familia…pero sobre todo es la época en que se celebra el nacimiento de Jesús.

Por supuesto que hay legalistas y puristas que alegan que Jesús no nació en esta fecha si no que en Marzo, y la verdad es que no hay una plena seguridad. De lo único que estoy seguro es que vino a esta tierra por nosotros llegando a ser Dios hecho hombre: Jesucristo hombre.

Lo que más me sorprende es que el mismo Dios en persona pasó 9 meses en el vientre de la Virgen María, estuvo sujeto a sus padres y vivió una vida normal. Hay libros que enseñan que Jesús se fue a vivir a la India de los 12 a los 30 para “aprender”. Pero ¿Qué más tenía que aprender Dios mismo?  

“¿Dónde estabas tú cuando yo fundaba la tierra?” le preguntó Dios a Job…no hubo respuesta alguna.
La navidad nos sirve para acordarnos que Dios se hizo carne por nosotros para cumplir un sacrificio 
del cual ninguno de nosotros iba a ser capaz de sobrellevar en ninguna manera.


Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.